La primera reacción del oyente al escuchar que la muerte del Corso Berberisco se produjo en el siglo XIX suele ser siempre la misma: ¿Ah, todavía había piratas?. No solo había piratas, sino que en algunos momentos de aquellos primeros treinta años de siglo mostraron un estado de forma que recordaba a sus mejores tiempos.No mucha gente lo sabe. Para la mayoría, las historias de piratas son casi como cuentos para niños, pero fueron muy reales. Y su presencia estuvo ligada a la historia del Mar Mediterráneo durante siglos, de tal manera que no podría entenderse el uno sin el otro.Los corsarios berberiscos del norte de África y el desenlace de su historia en 1830 significan también algo más. Nos recuerdan que no hay finales cerrados de antemano, que a veces los acontecimientos se precipitan sin razón aparente y que la explicación causal sucede siempre a posteriori. Marca: BIBLIOMANAGER