En el mismo momento en que España está al borde de la agonía y asiste a la derrota del desastre del 98, Ganivet se atreve a reivindicar su cultura y su manera de ser. Vuelve la mirada hacia atrás y arremete contra lo que cree que ha desviado a España de lo que hubiera podido ser: una «Grecia cristiana». Rechaza el estoicismo platónico de la tradición española, que ha causado el gran defecto esencial de España, la abulia, y propone un cambio axiológico fundado en la voluntad, las ideas y la acción.Ganivet es un convencido de que quien cambia a las ideas cambia al hombre. Lo importante para él es el espíritu, vivir para el pensamiento y educar a los demás. En suma, se trata de un espiritualismo antropocéntrico, su fe está en el hombre. Marca: Não Informado